Después de haber sido expulsados del periódico Excelsior en 1976; un grupo de periodistas, encabezados por Julio Scherer, decidieron reunirse para formar una nueva revista política. Enrique Maza la nombró Proceso, y la revista sería el inicio de una nueva era para la política mexicana. En ella se relatarían sin censura, dando a conocer de forma clara los sucesos en el país: "El proceso de los hechos, proceso a los hechos y a sus protagonistas". El silencio ya no sería el protagonista de la nueva forma de pensar en el país. Bajo esta línea nace el semanario Proceso el 6 de noviembre de 1976.
"En Proceso habíamos descubierto no sólo un nuevo camino sino una nueva forma de hacer un periodismo de verdad, autónomo, libre" decía Julio Scherer. El semanario trata temas de relevancia y notabilidad como censura, narcotráfico, corrupción, justicia, política, derechos humanos... Proceso es el sueño de varias personas como Miguel Ángel Granados Chapa y Raquel Tibol. Ahí encuentran un espacio para escribir periodistas destacados como Denise Dresser, Néstor De Buen Lozano y Jenaro Villamil. Caricaturistas como José Hernández y Antonio Helguera también participan en la revista política que lleva más de 30 años.
Lo interesante sería analizar también en que momento se pierde el rumbo y la intención, es decir, como en pro de la no censura, el análisis profundo, etc., se termina con una foto acompañado de uno de los delincuentes más buscados en la portada...
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